El día de hoy, 11 de octubre el Senado de la República votó a favor de la prohibición de los esfuerzos para corregir la orientación sexual y la identidad de género en llamadas ECOSIG.
Éstas prácticas han sido consideradas como actos de tortura por parte de organismos internacionales a favor de los derechos humanos como la Comisión internacional de derechos humanos.
Sin embargo, desgraciadamente sigue siendo una práctica muy común particularmente en estados conservadores que tienen vínculos muy estrechos con grupos religiosos que simulan o disfrazan hospitales o centros de recuperación física o mental para literalmente secuestrar a sus propias familias LGBT.
En esos espacios donde clandestinamente les priva de libertad, bajo la supuesta terapia de corregir la orientación sexual no heterosexual así como la identidad qué no sea así cisgénero reciben también privación del sueño, de la alimentación, malos tratos, humillaciones, entre otras prácticas que como ya he dicho son consideradas actos de tortura.
Rebeca Garza
Memoria gráfica


