Meditación: Caminando sobre la Tierra

Camina despacio, de forma relajada. Cuando practicas de esta manera, tus pasos son los de la persona más segura de la tierra. Siente la gravedad que hace que cada paso se adhiera a la tierra. Con cada paso, estás enraizado en la tierra.

Una forma de practicar la meditación caminando es inspirar y dar un paso, y centrar toda tu atención en la planta del pie. Si no has llegado plenamente, al cien por cien en el aquí y el ahora, no des el siguiente paso. Seguro que puedes dar un paso así porque hay budadanatura en ti. La budadanatura es la capacidad de ser consciente de lo que ocurre. Es lo que te permite reconocer lo que estás haciendo en el momento actual y decirte a ti mismo, estoy vivo, estoy dando un paso. Cualquiera puede hacerlo. Hay un buda en cada uno de nosotros, y debemos permitir que el buda camine.

Mientras caminas, practica la respiración consciente contando los pasos. Observa cada respiración y el número de pasos que das al inspirar y al espirar. No intentes controlar la respiración. Deja a tus pulmones todo el tiempo y el aire que necesiten, y simplemente observa cuántos pasos das cuando tus pulmones se llenan y cuántos das cuando se vacían, consciente tanto de tu respiración como de tus pasos. El vínculo es el recuento.

Cuando camines cuesta arriba o cuesta abajo, el número de pasos por respiración cambiará. Sigue siempre las necesidades de tus pulmones. Puede que notes que tu exhalación es más larga que tu inhalación. Puede que des tres pasos al inspirar y cuatro al espirar, o dos pasos y luego tres. Si esto te resulta cómodo, disfruta practicando de esta manera. También puedes intentar que la inspiración y la espiración tengan la misma duración, de modo que des tres pasos con la inspiración y tres con la espiración. Sigue caminando y encontrarás la conexión natural entre tu respiración y tus pasos.

No olvides practicar la sonrisa. Tu media sonrisa aportará calma y placer a tus pasos y a tu respiración, y te ayudará a mantener la atención. Después de practicar durante media hora o una hora, descubrirás que tu respiración, tus pasos, tu conteo y tu media sonrisa se funden en un maravilloso equilibrio de atención plena. Cada paso nos asienta en la solidez de la tierra. Con cada paso llegamos plenamente al momento presente.

Thich Nhat Hanh

(1926-2022) Monje budista zen, escritor poeta y activista por la paz vietnamita.

Poema de meditación caminando

Me refugio en la Madre Tierra.

Cada respiración, cada paso

manifiesta nuestro amor.

Cada respiración trae felicidad.

Cada paso trae felicidad.

Veo todo el cosmos en la tierra.

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